En el último año, el exceso de suministro y la baja demanda han disparado una de las peores crisis de precios del crudo que ha sufrido el mercado. Sin embargo, en el 2016 podría cambiar el panorama negro de la industria petrolera.
Según informó la Agencia Internacional de Energía (IEA, por sus siglas en inglés), se estima que los países fuera de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) sufrirán una contracción en su producción por primera vez desde 2008, cayendo unos 200.000 barriles de crudo por día.
Además, la agencia indicó que el consumo crecerá un 1,4 millones de barriles diarios, lo que le permitiría al cártel aprovechar la oportunidad para expandir su mercado.
“Declarar que su política fue un fracaso es un gran salto”, señaló Greg Sharenow, vicepresidente ejecutivo de Pacific Investment Management. “No creo que se deba analizar el plan de Arabia Saudita y de la OPEP con la vista puesta en seis o 12 meses. En el largo plazo, lo que se va a ver es una menor oferta fuera de la OPEP, una mayor demanda y una mayor participación en el mercado para ellos”, agregó.
En noviembre del 2014, el cártel decidió mantener su producción a pesar del desplome de los precios internacionales del crudo con el fin de defender su cuota de mercado, detalló World Oil. La misma medida fue tomada en junio de este año, disparando una nueva caída en los valores del petróleo.
La cuota de mercado de la OPEP se contrajo en 2014 ante la creciente producción de pozos de esquisto en Estados Unidos. Sin embargo, la caída de los precios podría resultar beneficiosa para el cartel debido a los costos del shale en el país norteamericano.
De todas maneras, la estrategia del cártel no pareciera contar con el aval de todos sus miembros. Irán, Argelia, Irak, Libia, Nigeria y, recientemente, Venezuela insisten en que se debería realizar una reunión extraordinaria de la OPEP para analizar una nueva estrategia ante la más reciente caída de los precios, aunque representantes del cártel negaron que se vaya a producir.